Seduce diariamente a tu pareja (I)

Del mismo modo que en post anteriores hemos hablado de adquirir una actitud seductora frente al mundo en general, es momento de hablar de la parcela de la intimidad: La seducción entre tú y ella.

Primero, y lo más importante: Si organizaste bien tu seducción al principio, ya tienes un paso dado. Si la conquistaste con tu personalidad y aplomo, subcomunicando que no te vuelcas con nadie si no lo merece, impregnando tus conversaciones de valor, y telegrafiando que la eliges a ella porque tiene algo especial siendo consciente de que eres una persona con opciones, empiezas bien.

En cambio, si empezaste regalando tu marco, comprándole copas a ella y a las amigas, corrigiendo tus frases frente a ella para buscar aprobación, invitándola a todas las cenas habidas y por haber, ya tienes un par de goles en contra. Primero porque si finalmente está contigo será porque buscaba un "pardillo proveedor". Y segundo porque ya le has subcomunicado que tiene poder sobre ti (¿qué carajo haces babeándole el hombro a la primera desconocida que se te cruza? ¿acaso eres un Aladino de personas que merecen la pena?).

Bueno, yo rezo porque pertenezcas a la primera opción. Si estás en la segunda, rezo porque te deje tu novia por un millonario y tengas la oportunidad de aprender a seducir arrollando con tu personalidad, y no con tu capacidad compradora. A golpe de cartera podrás atraer mujeres, pero para que te sigan adorando cuando se acabe tu dinero hay que tener algo (mucho) más que plata.

Bueno, no quiero despistarme. Ella es especial. Lo has comprobado antes de decidir que la quieres a tu lado. Y ahora está contigo porque tu también eres especial. Preparate para un examen largo: Durante bastante tiempo ella no va a parar de comprobar si el galán que la conquistó vive o no en un castillo de naipes. Es algo inevitable, la mujer selectiva es la que se ha impuesto en la evolución y la tuya en concreto no quiere equivocarse al mezclar sus genes. Es el momento de demostrar que no eres un inútil emocional, que conoces sus necesidades y que sabes comunicar las tuyas.

1. Regala emociones. Explota toda su gama sensorial. Usa la música (oído), visita sitios donde haya un buen perfume o utiliza algo de incienso en casa (olfato), mira fotos o películas con ella para explotar la memoria visual. Buscate unos caramelos especiales y compartidlos, etc. Ella debe anclar lo sensitivo a tu compañía.

2. Escúchala sin aportar soluciones. Ella no quiere contarte sus cosas para que tu se las soluciones. Quiere comunicarte contigo como forma de conexión y empatía. Es algo que ya tuviste que aplicar en los primeros compases de vuestro romance. No aplicar esto bien la aleja de la zona de confort, y te aleja a ti del perfil de hombre que ella necesita.

3. Cualifica tus armas sexuales. Hazla gozar, aprende a hacer las cosas con el ritmo y la precisión adecuada. Algo que funciona muy bien porque conecta con una fantasía típica de muchas chicas es, una o dos veces al mes, hacerlo sin excesivo calentamiento, mostrándote muy deseoso y dominante, subcomunicando que su cuerpo es un irresistible dulce capaz de conectar con tu parte más institiva.

4. Conecta con su pasado. Esto es muy divertido. Juega con ella expontáneamente a la Oca, o alquila una película de Disney. Decide algunas cosas con ella jugando a piedra papel o tijera. Juega al escondite en tu casa. Conducela hacia estos juegos eventuales, haciendo que se ría y que disfrute. Hazla vibrar.

(Continuará)