Tu energía

Un seductor siempre juega con ventaja cuando sabe maximizar su energía y lidiar correctamente con las ocasiones de vaciarla
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El concepto energía es muy amplio. Por ella se interesan tanto los que la necesitan para trabajar (como creativos de publicidad, abogados, músicos en gira) como los que la necesitan para relajarse. También hay quien se cambia de piso y tarda en acostumbrarse al cambio magnético y se pasa algunos dias con insomnio. También usan el mismo vocablo quienes se dedican a depurar ventanas y puertas con grafismos y mandalas o incluso los que afirman que si existe Dios será puramente energía.

Yo no voy a ir tan lejos en este texto, pero no por ello le quito importancia al concepto: Si seducir fuera como viajar en coche, tu experiencia como seductor será tu autoescuela, tu personalidad y creencias tu vehículo, y la energía tu gasolina. Una gasolina un tanto extraña porque una de las mejores gasolineras la llevas tu mismo.

La energía es un término más amplio que juego interno: un alineamiento positivo en el "pensar" y el "actuar" es una potente fuente de energía pero no es lo único. La actividad física, una correcta alimentación, disfrutar de los amigos, el red-bull que disfrutas a las 3 de la mañana también genera energía entre miles de cosas más.

Hay otras fuentes de energía que son más dificiles de entender cuando eres demasiado joven, pero que terminan siendo muy valiosas cuando tomas conciencia de su aporte: ser agradecido con el día a día, ayudar o acordarte de alguien a quien quieres, comunicarte con el mundo con mayor tolerancia... rozan incluso lo espiritual sin serlo, pero realmente te proporciona una energía bestial cuando lo haces sin esperar nada.

Hay un libro por ahi que se llama "El Secreto", que pese a que es bastante exagerado en ciertas cosas, conecta un poco con esto que os acabo contar. Concibe el amor a los demás como una energía de absoluta recuperación. Aunque suene idílico, ya sabeis que hay gente que en lugar de irse a Cancún en Agosto se va a Puerto Rico a tirar escombros, sintiéndose absolutamente recompensado con solo sentir la energia que le transmite la sonrisa pobre de la gente a la que ayuda. Con esto no quiero decir que irse a Cancún no sea energético, claro está. Cada uno elige su gasolinera en cada momento.

Lo más importante de la energía no es tanto el "cómo la ganas" sino el "cómo la pierdes". En este punto habrá quien enumere doscientas causas y sus doscientos remedios. A mi me va mucho mejor desde que reduzco todas esas causas a una sola:

Los pensamientos. Sólo la calidad de los pensamientos.

Fijate que el estrés, por ejemplo, es una sensación provocada por una interpretación o pensamiento de la realidad, no de la realidad en sí (¿qué parte del estrés no era tuyo en aquel trabajo que hiciste brillantemente tras decidir tomartelo con estoica serenidad?). Con la desesperacion pasa igual: si muere alguien querido, no todos los familiares rompen a llorar inoperantemente: hay uno que habla con el seguro, realiza las gestiones o incluso consuela a los demás. La realidad es la misma, el pensamiento es el que infla o desinfla.

Siempre pienso que no soy el responsable de todo lo que me pasa, de si mi socio me haya abandonado o que el ordenador se haya extropeado en el peor momento, por decir algo. Pero sí de los pensamientos que genero a partir de eso. De esa calidad depende la flutuación de nuestra energía diaria., ¿no crees?